Hola, soy retraso.
Soy una palabra que solía ser despreciada por otros, aunque en ocasiones, el tener un retraso era motivo de alegría.
Sigo sin entender a los humanos.
Hoy quiero hablaros de lo que me pasó, porque quiero que sepáis que las ayudantes atractivas no son nada bueno para mi.
Yo tenía un gran amigo.
Mi mejor amigo, podría decirse.
Íbamos siempre juntos, eramos uña y carne, no podíamos estar mas unidos. Pablo y yo.
Pero un día apareció ella.
Al principio no era una amenaza, era una ayudante mas.
Pero luego Pablo empezó a escucharla y claro, una de las cosas que le dijo es que no podía venir siempre conmigo.
Dice que no quedaba serio.
Y lo dijo delante mía, no le importó que yo fuera en el coche con él, y como siempre tenía el manos libres y la muy perra lo sabía.
Quería destruirme.
Bien, pues lo hizo.
Me arrebató a mi único amigo.
Empecé a odiar a las mujeres y aparecí en sus vidas haciendo que mi amiga la regla no apareciera.
Ellas me odiaban, pero yo disfrutaba haciéndolas sufrir.
Pero un día una mujer, Montse se alegró y ese día la conocí.
Al amor de mi vida.
Se llamaba Espera.
Ella había estado con esa mujer muchos años y cuando aparecí, ella me abrió sus brazos.
Nos enamoramos.
Ahora estamos juntos.
Haciendo maldades de tráfico para aparecer en los humanos que tanto daño nos hicieron.
Pero no podemos evitarlo, siempre que Pablo y Montse esperan o se retrasan, aparecemos.
Hay cosas que no se olvidan y todos los momentos juntos...
No te olvidaré Pablo!
Y si Pablo,. Te lo dedico a tí, que siempre llegas tarde, ¡COÑO!
Un beso para todos los tardones del mundo!
Feel the magic!
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